Y lo primero que hacéis no es desear los buenos días, sino tararear esa canción.
Es automático, abrís los ojos y empezáis a cantar…
«Por ser Scout soy alegre y joven
y nada me cuesta sonreír,
por ser Scout lucho cada día
y me empeño en ser útil y servir.
Por ser Scout sueño noche y día
en volver mi mochila a cargar
de emociones, cantos y esperanzas
y de amigos que el bosque me dará.
Mírame, oh Dios, desde el cielo
Respóndeme si mi camino llega a ti.
Ya sabes que soy un hombre
y como tal caeré.
Pero si me ayudas,
pero si me ayudas,
venceré.
Por ser Scout, conozco la alegría
de servir, amar y comprender,
no me arredra lo duro del camino,
sé que con tu ayuda llegaré.
Y siempre así, viviendo el Escultismo
una gran familia se ha de hacer
donde tú y yo nos encontremos
siguiendo el ejemplo de B.P.
Mírame, oh Dios, desde el cielo
Respóndeme si mi camino llega a ti.
Ya sabes que soy un hombre
y como tal caeré.
Pero si me ayudas,
pero si me ayudas,
venceré.»