El 18 de diciembre de 1990, la Asamblea adoptó la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y De Sus Familiares.

Actualmente, la migración internacional es un fenómeno en aumento que puede contribuir de forma positiva al desarrollo de los países de origen y los países de destino, siempre y cuando se respalde con políticas adecuadas.

Se estima que, a día de hoy, alrededor de 150 millones de personas viven y trabajan fuera de sus países de origen.

Entre ellas encontramos trabajadores y trabajadoras migrantes, población refugiada, demandantes de asilo, e inmigrantes permanentes.

Las razones que tienen para abandonar su país de origen son muy distintas y cambian de una persona a otra.

Sin embargo, podemos identificar una serie de circunstancias que llevan a la gente a abandonar su hogar y buscar un mejor futuro en otro lugar.

La exclusión social y económica, la atracción que ejercen los países más desarrollados, la necesidad que tienen esos países de contar con la migración, los conflictos armados internos y los desastres naturales, todas ellas son causas que provocan migración.

El respeto de los derechos y las libertades fundamentales de todos los migrantes es fundamental para cosechar los beneficios de estas migraciones.

Es necesario fortalecer la cooperación internacional en materia de migración internacional a nivel bilateral, regional y global para que estos movimientos sean realmente positivos.

Vía Naciones Unidas, CIAM y AulaIntercultural