«Las tecnologías de la información y las comunicaciones tienen el potencial de brindar nuevas soluciones a los problemas del desarrollo, en particular en el contexto de la globalización, y pueden promover el crecimiento económico, la competitividad, el acceso a la información y los conocimientos, la erradicación de la pobreza y la inclusión social».

En el año 2000, los líderes mundiales se comprometieron a lograr ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) para 2015, tanto en el ámbito de la salud, la educación o en la lucha contra la pobreza.

Esa ambiciosa agenda ha contribuido ya a mejorar la vida de muchas personas en el mundo y a impulsar el desarrollo en países pobres.

Algunos de esos Objetivos se han alcanzado ya o están a punto de lograrse.

Sin embargo, en otros queda mucho trabajo por hacer para conseguirlos en esa fecha e, incluso, extender esos avances más allá de la fecha propuesta.

Disponer de información amplia, puntual y relevante acerca de todos los asuntos vinculados al desarrollo, así como un mayor acceso a la tecnología y a las nuevas vías de comunicación que han surgido, contribuirá a avanzar en los esfuerzos por mejorar las vidas de las personas, sobre todo en las regiones con menos recursos.

«El rol de la tecnología es clave para activar una amplia participación en el desarrollo y en dirigir el propio desarrollo», señaló la Administradora del PNUD, Helen Clark, durante una reunión celebrada el pasado verano en Londres relativa a esos temas.

La mejora de la difusión de la información y la movilización de la opinión pública, especialmente de la juventud, es un factor importante para lograr un mejor conocimiento de los problemas generales del desarrollo.

Vía Naciones Unidas