>> Gafas: La Organización Mundial de la Salud calcula que unos 153 millones de personas padecen algún problema de visión que es fácilmente corregible mediante el uso de gafas; sin embargo, millones de personas no tienen acceso a ellas.

Seguro que alguna vez tú o algún amigo os habéis preguntado “¿Qué puedo hacer con las gafas que ya no utilizo? ¿Las puedo aprovechar de nuevo? ¿Existe alguna organización que se encargue de ellas?”.

La respuesta es sí, así que lo más importante es que no las tires. Te damos algunas ideas para que tus gafas puedan ayudar a millones de personas a corregir por primera vez sus problemas visuales y a permitirles leer, ir a la escuela, obtener un empleo o cuidar de sus familias.

>> Ropa y tejidos: Cada año, en el Estado español, se tiran enormes cantidades de prendas de vestir. Del millón de toneladas de este tipo de residuos que acaban en el vertedero, 400.000 toneladas son prendas de vestir.

Además, entre un 3 y un 5% de la basura doméstica son tejidos: trapos del polvo, ropa vieja y objetos de decoración pasados de moda, incluidas alfombras.

Muy pocos se salvan de cubo de la basura, a pesar de que la mayoría de ellos, si se reciclaran, tendrían muchas y útiles salidas. En todo el mundo existe ya una industria que se dedica a recuperar, reutilizar y reprocesar todo tipo de materiales textiles.

Además, entidades como las que conforman AERESS tienen en marcha proyectos para alargar la vida de nuestra ropa usada. son pioneras en sus localidades de trabajo en recogida y tratamiento de ropa usada. La ropa la recogen puerta a puerta, en contenedores especiales en la calle o en parroquias y colegios.

Hacer una colcha estilo patchwork o una almazuela es un buena idea. Son mantas realizadas a base de coser trozos más o menos rectangulares de otros tejidos para reutilizar estos y quedan muy bonitas 🙂

>> Aceite: Todos los aceites usados, ya sean de uso industrial, de vehículos o el que usamos para cocinar son altamente contaminantes y muy difíciles de separar del agua en las plantas de tratamiento. Sólo un litro del aceite que usamos en casa para cocinar es capaz de contaminar hasta mil litros de agua, lo que supone un enorme impacto ecológico.

La retención del aceite en mares y ríos puede crear una película sobre la superfície de las aguas que dificulta el paso del oxígeno, matando así a los seres vivos que las habiten. Echar el aceite usado por el fregadero es un error. Y ¡ojo! quemarlo, como nos han sugerido, tampoco es una solución ya que cinco litros quemados contaminan el aire que respira una persona en tres años.

Podemos evitar fácilmente que los restos de aceite usado en la cocina de nuestra casa se conviertan en un contaminante de nuestras aguas. Te damos unos cuantos consejos útiles y prácticos para poder reciclar hasta la última gota.

>> Pilas: Las pilas gastadas gastadas contienen materiales tóxicos que pueden ser muy perjudiciales para la salud ya que contienen mercurio y otros elementos peligrosos. Una sola pila de mercurio puede contaminar 600.000 litros de agua y una alcalina 167.000 litros. Cada año se usan miles de millones de pilas en todo el mundo; por eso si no queremos contaminar, una vez gastadas, debemos llevarlas a los contenedores de recogida selectiva que suele haber en grandes supermercados o cerca de las paradas de autobús.

>> Móviles: Las estratégias de producción, venta y publicidad hacen que muchas personas deseen cambiar su móvil cada poco tiempo. Piensa si necesitas uno nuevo antes de comprarlo y si decides que sí, dona el viejo. Hay varias campañas activas como la de Dona tu móvil o Recicla tu móvil. Dado que las baterías suelen ser altamente contaminantes, hay algunas empresas que se dedican a ello, como por ejemplo Zonzoo. Una microacción con la que además podrás ganarte algún dinero.

>> Latas: Cada persona tira en un año alrededor de 13 kilos de latas de aluminio y hojalata, sólo en el Estado español. Esta cantidad supone más de seis millones de latas en toda España con las que podríamos llenar 17.500 camiones de 50 toneladas.

Para más inri, un envase de aluminio continúa siendo un residuo sólido después de 500 años. Siempre es preferible, pues, consumir productos con envases retornables. Pero si compras latas, deposítalas en el contenedor adecuado ya que su reciclaje supone un ahorro del 75% de la energía utilizada en su producción original con materias primas.

>> Libros: Tirar o destruir libros es una auténtica locura. Si no quieres conservarlos, la reutilización es la mejor solución. Muchas ONG los recogen, puedes informarte en Solidarios, o la ONG Aida. Recuerda que también puedes usar DoyBusco para donar tus libros, la nueva sección de reciclaje cotidiano de CanalSolidario.org. Acuérdate también de devolver las guías de teléfono a la compañía telefónica.

>> Medias: Aunque nunca lo hayas pensado porque se trata de un artículo pequeño y muy útil, en todo el mundo se venden grandes cantidades de medias y calcetines de nailon. Sólo en el Estado español se venden 500 millones de pares al año (cerca de 23 pares por mujer).

El nailon se rompe fácilmente con lo que las medias quedan inutilizadas y encima es una materia sintética no biodegradable. Se cree que su producción es la responsable del 10% de incremento de gas óxido nitroso en la atmósfera, un importante gas invernadero.

La solución es difícil quizá pasa por comprar modelos de buena calidad y larga duración o volver a los leotardos.

>> Medicamentos: La industria farmacéutica origina muchos residuos potencialmente peligrosos en su mayoría. La reutilización y el reciclaje no son una opción válida para la mayoría de estos productos. Sin embargo, puedes depositar tus medicamentos o caducados o que ya no vayas a usar en los puntos sigre. En la actualidad, más de 20.500 farmacias disponen de ellos.

>> Agua: En casa también podemos reciclar el agua, comenzando sobre todo por ahorrarla y usar lo mínimo indispensable en las tareas domesticas. Algunos consejos son lavar los platos dentro de una pila o palangana y reservar esta agua jabonosa para luego lavar el coche. Recoger el agua de la ducha en cubos y utilizarla para baldear los patios o para el wc.

>> Ordenadores: Ordenadores, impresoras, máquinas de coser, camas y camillas, material médico-quirúrgico y sanitario, material escolar en desuso, maquinaria agrícola… cualquiera de estos recursos es útil para la entidad Banco de Recursos, una organización sin fines de lucro fundada en Barcelona el año 1996 que recoge excedentes materiales de empresas y particulares de toda España y los envía a países y colectivos desfavorecidos para proyectos de educación, agricultura y sanidad. Infórmate.

>> Electrodomésticos: La mayoría de frigoríficos y congeladores están hechos de acero, un metal reciclable muy demandado en el mercado de la chatarra. Cada año muchos de estos electrodomésticos acaban depositados de manera ilegal en cualquier parte sin ser reciclados. Y aunque muchos electrodomésticos ya no contienen CFC, sí suelen llevar el dañino componente HCFC como sustituto en cantidades bastante considerables. Te damos algunas ideas para alargar la vida de tus electrodomésticos.

>> Neumáticos: En el Estado español se tiran más de 35 millones de neumáticos cada año. El 40% de ellos se depositan en vertederos sin control. Se pueden recauchutar colocándoles una nueva banda de rodadura para alargar su vida, pero si los quieres cambiar, llévalos a un taller mecánico.

Están obligados a reciclarlos. Si se reciclan, los neumáticos usados se pueden reutilizar para el asfalto de las carreteras, el suelo mullido de los parques infantiles de muchas calles, suelas de goma, campos de césped artificial o pistas deportivas. contienen ya caucho reutilizado de neumático.

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La foto es de murilo campos en Flickr