¿Qué preferiríais, donar un porcentaje de vuestro sueldo a causas medioambientales o cambiar vuestro estilo de vida para ser más ecológicos?

Esta misma pregunta le hicieron a Orestis, scout que se encuentra en el KISC.

No le acabó de gustar la pregunta, pues ambas posibles respuestas implican un sacrificio de una forma u otra.

Pero esta pregunta es una trampa.

La gente tiene que darse cuenta de que implicarse con la mejora de nuestro entorno no necesariamente implica compromisos serios o sacrificios.

De hecho, la cosa funciona al revés.

Si respetamos el medio ambiente y lo explotamos de una forma creativa, no es únicamente la naturaleza quien se beneficia de ello, sino también nosotros y nuestra sociedad.

En este enlace podréis ver algunas formas de respetar el medio ambiento sin dejar de sacar provecho de él.

Vía KISC ECO