Tantas cosas vividas, que podríamos escribir un libro entero…
Nosotros, la Comunidad Tótem del G.S Axóuxere, nos encontramos de vuelta a Ourense después de un fin de semana muy enriquecedor.
Nos marchamos de Ourense el pasado viernes 27/09 con mucha intriga e ilusión por ser el primer encuentro Ruta de nuestra generación.
Al llegar se notó enseguida el buen ambiente y vimos muchas caras conocidas, ya que muchos de nosotros ya habíamos coincidido en acampadas anteriores o en el San Xurxo del 2012.
Llegado el momento de la Asamblea, empezamos con las presentaciones tanto de las comunidades ya formadas como de los grupos de partida, y nos dimos cuenta de que todos teníamos los mismos problemas, pero claramente tenemos nuestras diferencias.
El hecho de haber comunidades y grupos de partida fue bueno para todos, ya que ahora los que están empezando tienen más idea de lo que es nuestra etapa Ruta, y no como los veteranos, que empezamos la etapa muy perdidos.
En cuantos a los proyectos, todos eran diferentes por la distinta visión que tenemos de cómo llevarlos a cabo, pero nos ayudaron a tener nuevas ideas tanto a los grupos de partida como a las comunidades.
También llegamos a la conclusión de que las animadoras juegan un papel distinto en cada comunidad, lo que nos hace diferentes en cuanto a la hora de trabajar.
Todo esto, enmarcado en un debate llevado a cabo por nosotros acerca de cuándo debería terminar la etapa Ruta.
Fue bastante bien por el hecho de que todos y todas participamos y pudimos conocer los distintos puntos de vista que había, tanto de los nuevos, como de los más veteranos, como de las propias animadoras.
El sábado por la tarde realizamos una actividad en ‘Kayak’ en la que hicimos un recorrido de 7 km por el río Navia.
Fue una experiencia nueva para muchos de los que estábamos allí, y para nosotros consistió en un trabajo en equipo ya que íbamos de dos en dos.
A parte de remar y remar, disfrutamos de unas vistas preciosas, acompañados, eso sí, de la lluvia.
También llevamos un buen susto al ver a Vanesa (animadora de Khanhiwara) y a Antón (ruta de Ronsel) que estuvieron a punto de ser arrastrados por la corriente, cayendo en un desvío del río.
Acabamos muy agotados y con mucha prisa, ya que llegamos al final del trayecto cuando solo faltaban 15 minutos para que cayese la noche.
De regreso al albergue, íbamos en dos furgonetas: ‘Plátano’ y ‘Manzana’, que más tarde pasó a llamarse ‘Pera’ porque es-pera por ‘Plátano’.
Finalmente llegamos al albergue tras un camino un tanto tedioso: tardamos mucho en llegar e íbamos muertos de hambre.
El albergue fue bastante agradable, a pesar de estar tan alejado.
Las dos noches las pasamos los rutas en una habitación y las animadoras en otra.
Nosotros dormimos en una más grande en la que había muchas literas donde cabíamos los 13 e incluso sobraban camas.
Las veladas fueron bastante tranquilas, ya que la primera noche estábamos muy cansados y sólo hicimos un buenas noches de reflexión acerca de lo que nos esperaba en la asamblea.
Para la segunda noche no teníamos nada preparado, pero después de la oración y de marchar las animadoras, conseguimos organizarnos todos y realizamos una valoración de la asamblea y de nuestras comunidades.
La última actividad del fin de semana fue la Acción Servicio, llevada a cabo gracias a la asociación Adega y su Proyecto Ríos, donde limpiamos una parte del río Miño a lado de la ciudad de Lugo.
Pensamos que nos iba a llevar mucho más tiempo, pero fue agradable darnos cuenta de que con tan poquito pudimos hacer tanto.
Fue una nueva toma de contacto con el voluntariado medioambiental, del cual teníamos muy pocos conocimientos.
Y para terminar la actividad, Zara, nuestra animadora de este fin de semana, tuvo que hablar con la radio explicando nuestra asamblea y promocionando el movimiento scout.
Como ‘guinda del pastel’, tuvimos una comida en un restaurante de Lugo, algo poco pensado en un campamento scout.
Después de un ‘Adiós Scout’ nos despedimos todos, que más que una despedida, fue un hasta luego.
Una saludo de mano izquierda, la Comunidad Tótem