Tras la presentación oficial del proyecto en la Asamblea de Padres del día 20, el pasado fin de semana daba comienzo el Proyecto Terruño.
El sábado, en la reunión, los responsables de la plantación por parte del pueblo vinieron a la base a explicarnos muy bien en qué consistía el proyecto y cómo nos íbamos a distribuir al día siguiente para comenzar la plantación.
Todas las Ramas aprendimos qué especies de árboles se dan mejor en ese tipo de terreno y cómo hacerlo bien para que los árboles que íbamos a plantar tuvieran más posibilidades de arraigar.
Además, cada uno de nosotros nos llevamos a casa una maceta en la que habíamos plantado un piñón para que, cuando brote, lo podamos trasplantar nosotros mismos.
O un pequeño ciprés que cuidaremos en nuestra casa para que vaya poniéndose fuerte y robusto antes de llevarlo al monte.
Pero la plantación fue el domingo.
A las 10.30 de la mañana ya estábamos chavales, padres y responsables en Arcos de la Llana, provistos de azadas, picos y palas.
Nos dividimos en dos grupos, cada uno de los cuales iba a plantar en dos zonas diferentes del pueblo.
Uno de ellos plantaría 50 cipreses en la vía pecuaria que estamos intentando recuperar y se encargaría de hacer el monumento natural a la Reina Juana, en un lugar situado entre el pueblo y la ermita por el que pasó dicha Reina.
El otro grupo se encargó de plantar robles y pinos en otra zona del pueblo.
Asistió muchísima gente del Grupo y el ambiente fue realmente estupendo, pese a que la metereología no nos acompañó del todo.
Pero eso no fue obstáculo para que las risas y el buen humor fueran la constante de la jornada.
Tras terminar el trabajo, como no podía ser de otra forma, tocaba reponer fuerzas y celebrar el trabajo bien hecho.
Así que nos pusimos a degustar una parrillada que nos preparó la gente de Arcos, que estaba deliciosa y entraba de maravilla para coger calorcito.
Ya después, a eso de la una y media del mediodía, nos fuimos a casa para descansar lo que quedaba del fin de semana.
El Proyecto Terruño ya está en marcha.
Ahora queda cuidar de esos árboles que hemos plantado para recuperar la vía pecuaria y mantener el monumento natural.
Os iremos informando de las siguientes fases del proyecto.