Hemos hablado con María Bartolome, estudiante, salamantina de 20 años y miembro del Grupo Scout La Flecha desde hace 12 años, donde comenzó en la rama de «Pietiernos» (lo que ahora conocemos como Castores) y ahora mismo es responsable de Manada, por lo que se la conoce más como «Bagheera».
Recientemente ha estado en Grecia, en un campo de refugiados y hemos querido entrevistarla para que nos cuente, de primera mano, cómo ha sido la experiencia y aprender de sus palabras.
En tu grupo habéis estado trabajando en el proyecto Giving Smiles, explícanos un poco en qué consiste.
«Giving Smiles» es un proyecto de la ONG Pangea Solidaria, formada mayoritariamente por scout y, en colaboración con MSC-SCyL.
La idea principal es llevar a cabo actividades lúdicas y deportivas en el campamento de refugiados de Katsikas (Grecia) donde se encuentran un gran número de niños y adolescentes.
¿Por qué decidisteis sumaros a este proyecto? ¿Cómo surgió?
El proyecto nos llegó a través de MSC-SCyL, nos encantó la idea de poder sumarnos en el proyecto y colaborar en la medida de lo posible.
Hicimos una charla informativa en nuestro grupo para que padres y niños conocieran de él, y la respuesta ha sido muy positiva.
Además, hemos realizado actividades con los chavales como reflexiones o dinámicas para comprender la situación que allí se está viviendo.
Luego, más a título personal, decidí apuntarme como voluntaria para trabajar en el proyecto activamente en el campo y cual fue mi sorpresa cuando una tarde, Víctor, coordinador del Proyecto, me escribió para comunicarme que iría hasta allí.
Y ahora acabas de llegar de Grecia habiendo estado en un campo de refugiados, ¿cómo ha sido la experiencia? ¿Qué balance haces?
La experiencia muy positiva y a la vez muy dura, el primer turno de voluntarios con el que yo viajé hasta allí hemos vivido situaciones bastante difíciles, como la salida de los kurdos yasidies del campamento…
Pero me quedo con todo lo positivo, la amabilidad y el cariño de los refugiados, su optimismo, su fuerza…
¿Cuál era vuestra misión allí? ¿Cómo era vuestro día a día?
Por las mañanas, trabajábamos en la guardería con los más pequeños del campamento: dibujando, pintando, haciendo puzzles que les encantaba y enseñándoles canciones… mientras que los niños en edad escolar recibían clases en «La Madraza» (colegio).
Por las tardes, realizábamos partidos de fútbol, baloncesto y sobre todo de Voleyball, que es lo que más les gusta ¡y encima son muy buenos jugando!
Además, en los ratos que teníamos libres colaborábamos en el resto de tareas que allí se realizan o aprovechábamos para conversar con los refugiados mientras tomábamos té, los visitábamos sus haimas (tiendas)…
¿Cómo os habéis organizado antes y durante la estancia en el campo?
Antes de marchar hacia Grecia hemos tenido varias formaciones y una vez allí, en el propio campo, al trabajar varias ONGs, todas las mañanas se hacía un meeting para el reparto de tareas del día, conocer la situación en ese momento del campo, etc.
¿Qué ha sido lo que más te ha impactado, sorprendido, impresionado…?
Lo que más te impacta es conocer sus historias, todo lo que han tenido que pasar antes y durante su estancia en el campamento.
Te sorprende que la mayoría de ellos en sus países eran de clase media-alta y que ahora se encuentren en esa situación.
También se hace difícil como los niños tienen totalmente normalizada la violencia, pero claro… es lo único que han visto.
Por lo que nos cuentas, nos podemos imaginar que habéis vivido situaciones duras, difíciles… ¿cómo lo gestionabais?
La verdad es que las personas que fuimos en el primer turno, junto a los dos coordis que se encuentran allí, hicimos un grupo increíble a pesar de no conocernos de antes.
Así que el apoyarnos los unos a los otros ha sido la mejor solución.
Seguro que habréis hecho mucho trabajo, pero, ¿os quedan cosas por hacer aún?
Allí siempre hay cosas que hacer y de un día para otro pueden surgir cosas nuevas…
¿Cómo están las cosas allí? ¿Te atreves a hacer alguna valoración, sacar alguna conclusión, proponer alguna solución de mejora…?
La situación para muchos de ellos allí es desesperante, no pueden hacer nada, no trabajan, los adolescentes en edad universitaria no tienen medios para continuar con sus estudios…
Y las condiciones de vida no es que sean muy buenas.
Son personas, como tú y como yo, que lo único que quieren es huir de una guerra que está destruyendo su país y tener una vida normal.
Por último, ¿quieres enviar un mensaje especial a todos los scouts?
¡¡Sigamos creando un Mundo Mejor!!