Compartir risas y anécdotas scout con nuestros hermanos de Ruanda o Costa de Marfil, tomarse un café en la Plaza del Panthéon con scouts de Bolivia y Colombia, escuchar de primera mano la tragedia vivida por Scouts de Haití, cenar bajo la Torre Eiffel con scouts de Portugal y Finlandia… Todo eso fue posible en “Paris d’Avenir”, el encuentro ruta organizado por Scouts et Guides de France que reunió a más de 3500 jóvenes de todo el mundo.

Allí estuvimos. Scouts MSC tuvo una digna representación con más de diez rutas procedentes de Scouts d’Asturies, Scouts de Albacete y Scouts de Castilla y León.
Los rutas de Asturies y Albacete llegamos dos días antes del encuentro para hacer un poco de turismo acompañados de un clan ruta de Yerres, a las afueras de París, que nos acogieron en sus casas y nos enseñaron en París más genuino.

El viernes nos reunimos con el clan de Valladolid y comimos juntos por el barrio latino para después asistir a los oficios del Viernes Santo.
Las actividades tuvieron lugar en el «104», un enorme centro cultural del norte de la ciudad donde aprendimos miles de cosas sobre interculturalidad con talleres, debates, y una gran velada donde el grupo «Amplitude», formado por scouts franceses hizo vibrar el escenario con sus canciones.
Después, muy tarde, nos fuimos a dormir a hoteles y albergues de toda la ciudad. Era impresionante ver todas las líneas de metro abarrotadas de rutas cantando y tocando la guitarra. Al día siguiente, gymkhana por París por la mañana y proyectos de solidaridad con asociaciones y ONGs de París. Los monitores que no participaron en estas actividades tenían un programa especial con ponencias y debates muy interesantes sobre la rama ruta y el papel del animador de la mano de especialistas de diferentes universidades francesas y del escultismo mundial.

El domingo fue el día del madrugón y el hambre. Con una barrita de muesli para desayunar nos fuimos a las seis de la mañana a la Misa de Pascua en Notre Dame, después nos hicimos unas fotos aéreas todos juntos formando la frase «la juventud sabe comprometerse» en la plaza de la basílica y nos dirigimos hacia Jambville, en gran centro scout de Francia, donde nos reunimos con los monitores de Scouts et Guides de France que estaban celebrando sus “Encuentros Nacionales”. Sólo entonces, después de caminar cargando con las mochilas los diez kilómetros que hay desde la estación del tren hasta el campamento, fue cuando nos dieron algo de cenar. En la velada de la noche éramos más de 7000 personas, la vista era impresionante…

El lunes fue también un día intenso, con talleres, visitas al campamento, ceremonia de clausura, jaleo para conseguir saber cómo iríamos a los diferentes aeropuertos…
De regreso a casa, aunque agotados, no dejamos de recordar anécdotas y de hacer planes volver a encontrarnos con todos en Finlandia el próximo año en el Roverway.
Queremos desde aquí dar las gracias a la organización, que en todo momento estuvieron disponibles para solucionar nuestros problemas y garantizar que todo salía a la perfección.