¿Qué sabemos de la capa de ozono?
Es una delgada capa de ozono de la atmósfera que se encuentra entre los 10 y 50 km por encima de la superficie de la tierra.
La capa de ozono absorbe la mayoría de los dañinos rayos ultravioletas que nos llegan desde el sol.
Si se agota la capa de ozono, como consecuencia del uso de ciertos gases, más rayos dañinos alcanzarán la tierra, ya que al estar dañada no podrá detenerlos.
Cuantos más rayos ultravioletas, más personas con cáncer de piel, cataratas oculares y otras enfermedades; las plantas tendrán menos rendimiento, los océanos serán menos productivos…
En 1994, la Asamblea General proclamó el 16 de septiembre Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, para conmemorar el día en que se firmó en Montreal, en 1987, el Protocolo relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono.
Se invitó a todos los Estados a que dedicaran ese Día a la promoción de actividades relacionadas con los objetivos del Protocolo y sus enmiendas.
La capa de ozono, que es una capa frágil de gas, protege a la Tierra de la parte nociva de los rayos solares, y por consiguiente, ayuda a preservar la vida en el planeta.
La eliminación de los usos controlados de sustancias que agotan el ozono y las reducciones conexas no sólo han ayudado a proteger la capa de ozono para la generación actual y las venideras, sino que también han contribuido enormemente a las iniciativas mundiales dirigidas a hacer frente al cambio climático.
Asimismo, han protegido la salud humana y los ecosistemas reduciendo la radiación ultravioleta dañina que llega a la Tierra.
El tema de la celebración de este año es «Protección de la capa de ozono: la misión sigue en pie».
Hasta el presente el Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono ha logrado cumplir algunos de sus objetivos de eliminación de sustancias que agotan el ozono.
Gracias a sus actividades, está disminuyendo la abundancia de sustancias que agotan el ozono en la atmósfera y se prevé que la capa de ozono se recupere hacia mediados de este siglo.
Sin embargo, siguen existiendo retos para la eliminación de esas sustancias.