Entrevista en el diario La Verdad a Marco García, responsable de Scouts Católicos de Albacete que ha participado en el proyecto europeo LoA (Lands of Adventure).
El Movimiento Scout Católico de Albacete ha participado en un proyecto ‘scout’ a nivel europeo: LoA, un campamento destinado a jóvenes de entre 11 y 16 años.
Es la primera vez que España participa en esta actividad, y las dos patrullas representantes de nuestro país han sido de Albacete.
La actividad, celebrada en Grecia, al norte de Atenas, desde el 6 al 16 de agosto, ha sido una «experiencia grandiosa», según nos cuenta Marco García, uno de los monitores de los niños participantes.
Marco se afilió a este movimiento con diez años, y tras dieciséis años en él, ha vivido una de las mejores experiencias de su vida.
Es por esto que está muy agradecido a todas las entidades que han colaborado, así como a los padres de los pequeños.
-¿Cómo ha sido la experiencia de este campamento europeo?
-Ha sido grandioso. Los chiquillos han disfrutado mucho y ha sido genial. Era muy raro que niños de tan corta edad participasen en un proyecto europeo porque normalmente suele ser a partir de los 16 años, pero han disfrutado mucho, han conocido a otros grupos ‘scout’ de Europa y ha sido muy enriquecedor para ellos porque han podido comprobar cómo trabajan en el resto de Europa.
A nivel personal estamos muy contentos porque hemos sido los primeros españoles en participar.
Solo podían ir dos patrullas de toda España y las dos han sido de Albacete.
– ¿Qué tipos de actividades realizaron?
-Había actividades tipo forum para resolver problemas mediáticos como medio ambiente, crisis, etc.
-¿Qué supone para ustedes ser los primeros españoles en participar en un proyecto de estas características?
-Cuando nos dieron la noticia se nos pasó de todo por la cabeza. Fue un ‘boom’ de alegría porque llevábamos trabajando en ello desde octubre.
Al principio solo nos apuntamos las dos patrullas de aquí, pero a raíz de marzo llegaron a apuntarse 37 de toda España.
Eso nos desilusionó bastante, pero la verdad es que el trabajo que hicieron los chiquillos fue buenísimo y muy original y el mérito es todo suyo.
-¿Qué había que hacer para ser seleccionado?
-Había que elegir dos de tres proyectos.
Uno consistía en hacer un vídeo montaje acerca de nuestro país, empezando a nivel nacional y bajando a la región, la ciudad y el grupo ‘scout’.
Otro era contactar con otra patrulla que participara y elegimos a la italiana. Nuestro objetivo era hacer una quedada, pero como era muy difícil quedamos en grabarnos haciendo actividades para intercambiar los vídeos después.
-¿Cuántos niños formaban las patrullas?
-Teníamos dos patrullas: una de siete niños y otra de cinco. Además, hemos viajado cuatro monitores con ellos.
Para el campamento también viajaron tres voluntarias.
– ¿Qué objetivo tiene el Movimiento Scout?
-Intentamos inculcar ciertos valores como la tolerancia, la fe, el compañerismo, la resolución de problemas evitando todo tipo de violencia…
Tratamos de fomentar los valores que cada uno aprende en casa, estando en contacto con la naturaleza.
-Una tradición que poco a poco se va perdiendo…
-Sí. Yo siempre digo que somos una especie de ‘burbuja’ dentro de la urbe.
Yo cuando era pequeño y me apunté nunca me imaginé que podría irme quince días a los Pirineos sin mis padres. Los niños de ahora están muy metidos en la ciudad y les falta mucho contacto con la naturaleza y el entorno rural.
-Las actividades del campamento se realizaban en inglés. ¿Supuso un obstáculo el idioma?
-Yo pensaba que sí lo podría ser, pero el nivel de inglés de los niños era bastante bueno y también ha sido más educativo que cuestiones de ‘listen and repeat’. Había que buscarse las mañas para expresarse, y los niños se han defendido muy bien y han hecho muchos amigos. De hecho, todas las noches el líder de cada patrulla y los niños hablaban en inglés y daban su valoración del día.
-¿Qué destacaría de esta experiencia?
-Hicimos un concurso de comidas en el que cada país preparaba unos platos y resultó muy curioso porque se veían platos con combinaciones imposibles.
Pero si me tengo que quedar con algo, me quedo con lo enriquecedor que ha sido. Cada día montábamos unos puestos de cada país y en cada uno se realizaba una actividad. Hemos aprendido mucho todos.
Vía La Verdad