A veces publicamos, muy a la ligera y sin pensar, información sobre nosotros que no deberíamos.
Y no sólo eso, a veces la información que publicamos es sobre personas ajenas, como miembros de nuestro grupo scout o asociación.
Nombres y apellidos completos, formas de contacto (como teléfono, mail, dirección…), datos bancarios, fecha y lugar de nacimiento, futuros planes…
Vamos, lo que se le suela llamar «información confidencial».
¡Y qué decir de las fotografías!
A todos nos gusta tener un álbum de las fotos de campas subido a Internet.
Es accesible, no ocupa espacio, podemos comentar las fotos siempre que queramos…
Pero, ¿sois conscientes del peligro de esta inocente acción?
¿Tenéis la autorización expresa de los padres para ello?
Dadas sus características, es útil, importante e imprescindible tener conocimiento sobre cómo usar Internet.
Un experto acudirá para tratar el tema y resolver todas vuestras dudas.