Los scouts ingleses nos preguntan cuál fue nuestra primera aventura scout.
Si empezaste tu vida scout como castor, quizás recuerdes la primera noche durmiendo en una tienda de campaña.
Si fue como lobato, igual lo primero que te viene a la memoria es aquella excursión en la que os pensabais que estabais viajando a un mundo paralelo, lleno de fantasía y seres mágicos.
Las aventuras de exploradores ya son más heavies… navegar por un pantano con una balsa que vosotros mismos habéis construido, colgar los sacos de dormir de los árboles y dormir en plan murciélago…
Cuando eres un explorador estás on fire, todo vale y te quieres comer el mundo (¡ñam-ñam!).
Lo que pasa que no siempre todo funciona…
Pioneros es una gran etapa de la vida: tienes la locura de un explorador, pero la cordura de un ruta.
Una combinación perfecta que te permite vivir aventuras increíbles como llegar a lo alto de una montaña de más de 3.000 metros, probar eso de la escalada o proponeros cruzar la península en bicicleta.
Y cuando eres ruta…
Cuando eres ruta, ya has aprendido que cada día es una nueva y gran aventura.
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Foto vía GS Antorcha
