Nunca se sabe cuándo podremos necesitar poner en práctica las habilidades scouts.
Mark, un chico americano de 19 años, estaba disfrutando de unos días de esquí en los Alpes Suizos.
De repente, una fuerte tormenta de nieve lo sorprendió.
Fuertes ráfagas de viento empezaron a soplar y los dulces copos de nieve se convirtieron en pequeños cuchillos.
Todo a su alrededor pasó a ser de color blanco y Mark perdió la orientación.
Estuvo más de 48 horas a la intemperie, en medio de estas increíbles montañas que son los Alpes, con gélidas temperaturas y nieve por doquier.
Finalmente, fueron unos excursionistas quienes lo hallaron sano y salvo, aunque con evidentes consecuencias de haber pasado dos días al raso.
Cuando le preguntaron cómo había podido sobrevivir, Mark explicó que era scout de Boy Scouts of America.
Esto le había dado experiencia y habilidades en ciertas situaciones.
¿Quién le habría dicho, aquella noche de campamentos haciendo vivak, que aquella experiencia le serviría años más tarde para salvarle la vida?
